Visitando a un amigo en su oficina quede muy asombrado cuando de manera inesperada un gran gato brinco sobre uno de los estantes. Al notar mi sorpresa, mi buen amigo, con un su acostumbrado tono amable dijo.
-No dejes que te impresione, es nuestro nuevo ayudante de la oficina.
Ampliando el tema me aclaró que desde que llegó ha sido un elemento muy positivo, que ha contribuido a disminuir el estrés entre todos los empleados propiciando un ambiente de trabajo más feliz e incluso más productivo.
Lo que pudiera pensarse que es una distracción se ha convertido en un elemento que favorece una mejor integración de la comunidad de trabajo, todos son más solidarios, amables, colaboradores y flexibles.
Claro que una mascota en la oficina genera gastos como son los que corresponden a limpieza, su área de estar, alimentos y servicios veterinarios, entre otros; pero este costo se ve recompensado de muchas maneras, por ejemplo, en general ha mejorado la puntualidad, han disminuido las inasistencias por incapacidad médica, la pérdida de tiempo propiciada por malos entendidos o problemas interpersonales, la resistencia a quedarse tiempo extra cuando es necesario, o el tiempo destinado a los alimentos, etc.
Es una realidad que no en todas partes es posible permitir la presencia de mascotas pero es innegable que durante siglos los gatos han rondado en algunos restaurantes, tiendas de abarrotes, cervecerías y granjas para matar ratas y ratones, o combatir otro tipo de plagas; muchos hospitales y asilos de ancianos tienen perros o gatos que ayudan en la tarea de acompañar o consolar a los pacientes. Los nobles caninos han colaborado con mucho éxito en áreas que requieren aumentar la seguridad. Los peces y las tortugas también son muy apreciados en las áreas de trabajo porque favorecen un ambiente más agradable.
Pero antes de decidir adoptar una mascota para la oficina es conveniente considerar la posibilidad de algunos inconvenientes, por ejemplo, alguien podría sufrir alguna alergia, o que la falta de control o de mal comportamiento pueda causar estragos o "accidentes" saltando por todos lados, poniendo en peligro el equipo o los documentos importantes. Un animal con demasiada energía, muy demandante de atención o con problemas de agresión, no deben estar en la oficina o usted podría enfrentar alguna demanda.
Hasta la próxima!
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Gracias anticipadas por su comentario.
Por favor, Ponga su nombre o seudónimo para poder darle continuidad a la conversación.
Seguiremos en contacto.